Una mierda de casa en una mierda de país con una mierda de clima y una mierda de playa donde no te puedes bañar de lo caliente y salada que está el agua. Y además, solo y apestado.
#79 Básicamente, cuando la información publicada sea veraz, de relevancia pública y sin utilizar expresiones injuriosas o vejatorias.
Recuerdo un caso en el que un periódico "serio" publicó la foto de un detenido por asesinar presuntamente a la hija de su pareja. El titular era "La mirada del asesino".
Cuando se demostró su inocencia, creo que al periódico le metieron un buen puro
#85 Pues habrá que apechugar. Los más afectados serán los que vinieron solo por ese trabajo. Que se vuelvan, así es la vida.
Lo que no puede ser es que la gente del lugar no encuentre piso o no pueda pagarlo, que sus calles se conviertan en lugares sin ley, que no puedan pisar su propia playa, que destruyan sus parajes naturales o que les corten el agua de casa para llenar la piscina de un jodido hotel.
#74 Mira, nadie está hablando de cargarse el turismo, vale ya con esa cantinela. La gente tiene derecho a decidir cómo no quieren que sea su pueblo o ciudad.
#61 Seguramente en ese pueblo que conoces son muy felices así. La noticia no habla de ellos, sino de otros que están hasta los cojones de la masificación turística. Yo conozco más de uno...
#4 Algunos todavía no se han enterado de que las subvenciones se recuperan independientemente de la rentabilidad de la película.
Porque las subvenciones se gastan en contrataciones de personal, alquileres, servicios, comidas, transportes, alojamientos, etc. Y esto, además de generar impuestos, ayuda a crear y mantener una industria.
Luego, si la película no es rentable, las pérdidas se las come con patatas el productor.
Si voy a 120 adelantando un camión o lo que sea, se me pega uno detrás y me pica las luces, ya está incumpliendo tres normas: supera la velocidad permitida, no respeta la distancia de seguridad y hace señales indebidas.
Así que me mantengo en el carril y si quiere que me adelante por la derecha y cometa la cuarta infracción.