Yo tuve una pareja como tu abuela. "Mira, te he comprado gambas para que tapeemos el viernes por la noche". Sí, las has comprado, con mi dinero, y porque te han apetecido a ti. Pero no digas que me las has comprado a mí.
"¿No quieres encargar un pollo asado para comer al mediodía?". Si quieres pollo, dilo y se compra.
O le decía de salir a cenar y le daba tres restaurantes de alternativa y que eligiera. Y ella decía que le daba igual por mucho que insistiera. Pues fuésemos al que fuésemos, indefectiblemente se quejaba del servicio o la comida, y que mejor haber ido a uno de los otros.
La anécdota más graciosa fue una vez que salimos y se resfrió, y me echó la culpa a mí porque yo no le había dicho que se llevase algo de abrigo.
La aguanté un tiempo porque era joven y en tiempo de guerra cualquier agujero es trinchera, pero las relaciones tóxicas mejor dejarlas pronto. El mundo está lleno de mujeres maravillosas para tener que andar aguantando petardas.
"¿No quieres encargar un pollo asado para comer al mediodía?". Si quieres pollo, dilo y se compra.
O le decía de salir a cenar y le daba tres restaurantes de alternativa y que eligiera. Y ella decía que le daba igual por mucho que insistiera. Pues fuésemos al que fuésemos, indefectiblemente se quejaba del servicio o la comida, y que mejor haber ido a uno de los otros.
La anécdota más graciosa fue una vez que salimos y se resfrió, y me echó la culpa a mí porque yo no le había dicho que se llevase algo de abrigo.
La aguanté un tiempo porque era joven y en tiempo de guerra cualquier agujero es trinchera, pero las relaciones tóxicas mejor dejarlas pronto. El mundo está lleno de mujeres maravillosas para tener que andar aguantando petardas.