Veo que circula mucho mito -o mucho recurso a la Wikipedia- sobre "leyes", "patriarcas" o "jueces" gitanos... Así que os lo pretenderá explicar, lo mejor que pueda, un servidor, hijo de un gitano y una paya. En principio, dejemos claro que la declaración del acusado es, simplemente, mentira, tal y como la formula. Los gitanos -que no son un único pueblo, sino varios- suelen llamar "ley gitana" a un conjunto de usos consuetudinarios -casi todos socialmente conservadores- al que ajustan su conducta o apelan en caso de conflicto. Esto es compartido por todos los gitanos. Ahora bién, hagamos el primer distinguo: hay enormes diferencias entre grupos al respecto.
Se suele identificar casi exclusivamente al gitano español con los tipos agorilados, delincuenciales, analfabetos y de peculiar acento que aparecen en "Callejeros". Estos ejemplares, sin embargo, son catalogados por la mayoría de gitanos con apelativos como "peludos", "fabios", "indios" o "salvajes", y tienen el mismo estatus marginal dentro de la etnia que puedan tener los quinquilleros o mercheros entre los payos. Para ellos, inmersos en el rechazo de cualquier forma de cultura o instrucción, machistas, endogámicos, violentos y atrasados, funciona este concepto de la mujer como objeto que se posee, igual que funciona el robo de cobre, el trapicheo con drogas y el chabolismo o el seminomadismo. Ellos sí tienen la figura del "patriarca" (un gitano normalmente viejo y pedorro y aún más machista, violento y delincuente que los jóvenes) que es ridícula para la mayoría de gitanos.
Y es que la mayoría de gitanos en España son "invisibles", integrados en el conjunto de la sociedad: contra el tópico, no llevan cadenas gordotas de oro, no se dedican al trapicheo, la venta ambulante de "malacatones" o el cante flamenco; suelen practicar los mismos oficios que los payos, llevan a sus hijos a la… » ver todo el comentario
Podrían deshidratarlo y cuando estuviera seco molerlo. Llevar el polvo en una bolsa que nadie sospecharía, y al llega a Ecuador tirarle un cubo de agua encima y ya tendríamos de nuevo a Assange.
#75 Soy gallego y te puedo garantizar que de todos los gallegos que conozco, que son unos cuantos (miles), ninguno responde ni de lejos al estereotipo racista que comentas (y que en mi opinión debería erradicarse), de la misma forma que no conozco ningún catalán tacaño ni ningún andaluz vago, y también conozco unos cuantos. Imagino que por pura estadística alguno habrá, pero te puedo confirmar que para que esos mitos sean reales debería haber tal porcentaje de cada uno que no es posible que no conozca a nadie.
Dicho todo lo cual, ese mito concreto viene con bastante probabilidad de una respuesta de clase, no nacional.
Para terminar de puntualizar, Rajoy es gallego en el sentido administrativo del término, que curiosamente no significa nada puesto que no existe ninguna jurisdicción ni estado independiente; en la otra vertiente, la de pertenencia a una comunidad y una cultura, Rajoy no tiene absolutamente nada de gallego, y no es porque yo se lo deniegue, es porque él mismo lo rechaza con todas sus fuerzas, y a las hemerotecas me remito. Este señor es español, que es otra palabra polisémica, y en el aspecto que él considera, se refiere a español nacionalista y fuertemente partidario del régimen anterior.
Dicho todo lo cual, a mí me parece que este tío habla con una claridad diáfana. Se le podrá reconvenir que se expresa de una forma retorcida, pero lo que dice una vez separada la paja está más claro que Dios. El problema es que no dice nada para no comprometerse (normal, conociendo su caso). Igual que en el mito del gallego ambiguo, mucho me temo que el problema está en el receptor, no en el emisor.
#2#6
The only people who are obsessed with food are anorexics and the morbidly obese, and that in erotic terms is the Catholic Church in a nutshell. (Stephen Fry)
Trad libre: Los únicos obsesionados con la comida son los anoréxicos y los obesos mórbidos, y eso en términos eróticos es la iglesia católica en una palabra.
Este país es un desastre. El Jefe del Estado de caza y accidentado, un heredero a la corona en el hospital con un tiro en el pie, la futura reina consorte anoréxica perdida, el marido de una infanta imputado, el otro con un inctus cerebral al parecer por esnifar coca. Vamos camino de los 6 millones de parados, el Estado tiene dificultades de financiación, el ministro del interior amenaza con declarar terrorista a quien queme un contenedor, se perdonan las deudas a los ricos y se le suben los impuestos a los pobres.
Para que luego digan que los españoles somos fratricidas. Si todavía no hemos entrado en guerra civil es porque hay partido barça/madrid...