De todos es sabido que el wifi nos acerca al porno, las descargas ilegales y sobre todo al conocimiento. Este último es el primer responsable de cáncer revolucionario, algo que viene muy mal para la estupidez general.
El humor es lo mejor del mundo, pero no olviden que es un niño de tres años que ya debía estar acostumbrado a sufrir maltrato y su terrible final. Hay momentos para todo.