#16 Primero de todo, te felicito por lo fácil que presentas tu falta de conocimiento, ya que esto hace más sencillo saber con qué tipo de persona se está debatiendo. En segundo lugar, aunque te duela, quiero comunicarte que, efectivamente, la actividad cinegética como instrumento de gestión del medio natural tiene una gran base científica y resulta ser fundamental para el control de poblaciones animales y, en general, para la conservación del medio ambiente desde un punto vista antrópico. Y digo desde un punto de vista antrópico porque que menciones que la naturaleza no requiere de cazadores es cierto si aceptamos lo que la naturaleza nos da sin ningún tipo de intervención. El problema es que es una falacia que tú y muchos promulgáis el hecho de que conservar es igual a no tocar o no gestionar, es decir, abandonar. Cuando se deja a la naturaleza evolucionar a sus anchas el bienestar del ser humano se ve fácilmente comprometido. ¿De qué forma? Pues muy sencillo, igual que un bosque que no recibe una gestión forestal sostenible es carne de cañón para los incendios forestales al encontrarse abandonado y tener una alta densidad de vegetación, normalmente, pirófita la cual emplea el fuego para regenerarse de forma natural, las altas densidades de poblaciones animales pueden modificar el ecosistema de forma contraproducente afectando a la vegetación o a otras especies que compitan con dichas poblaciones, pudiendo llegar incluso a extinguirlas. En cuanto al ser humano, ahora que están muy de moda las enfermedades contagiosas, también te podría enseñar que la forman natural de regular las poblaciones es mediante enfermedades como la brucelosis, la mixomatosis, etc. que pueden acabar afectando directamente al bienestar humano. Y eso refiriéndome únicamente a las pérdidas en servicios ambientales derivadas de la no gestión de las poblaciones animales. También, te podría hablar de, por ejemplo, las pérdidas económicas que producen las excesivas poblaciones de conejos en los cultivos agrícolas o en las infraestructuras ferroviarias de Renfe al hacer madrigueras en los taludes que sostienen las vías. Sin embargo, creo que para tu nivel intelectual ya te he dedicado más tiempo del que mereces.
Por cierto, muy bueno eso de utilizar las herramientas de tus deidades sensacionalistas para desacreditarme diciéndome que disfruto disparando a animales. Es una lástima que, como parece ser costumbre en tu persona, te equivoques. No soy cazador, nunca he disparado un arma y he dedicado gran parte de mi vida a la conservación del medio natural a través de mi profesión como Ingeniero de Montes. Me queda la satisfacción de que la gente como yo somos los que tomamos las decisiones y no los charlatanes como tú.
#15 Sería genial que la Administración se encargara de ello, salvo por el pequeño inconveniente de que se pasaría de generar ingresos en las zonas rurales por la contribución de los cazadores al otro extremo, es decir, a generar un gran gasto público que pocos querríamos asumir si fuera la Admón. la única que empleara la actividad cinegética como instrumento de gestión.
Está bien que se condenen actos como éste, ya que la legislación actual es mucho más sensible al trato que reciben estos animales y no se concibe realizar prácticas que hasta ahora parecían ser normales. Sin embargo, de ahí a afirmar que la actividad cinegética es algo cruel que debería ser prohibido y que los cazadores son unos malvados sanguinarios, hay un gran trecho.
La actividad cinegética es algo necesario, los cazadores son más importantes de lo que creemos para gestionar con ella el medio ambiente y también resulta ser una fuente fundamental de recursos económicos para las zonas rurales menos desarrolladas.
Así que hay que condenar las malas prácticas, pero siempre evitando emplearlas como herramientas sensacionalistas para buscar votos fáciles pues a nadie le gusta el maltrato animal. Asimismo, se debe castigar a los infractores, a la vez que se debe formar e informar a los que puedan cometer los mismos errores en un futuro, pero sin prohibir y, sobre todo, sin sacar conclusiones precipitadas.
¡Bullshit! Todos los loables objetivos que plantea este bodrio de Anteproyecto son tapaderas para sus intenciones. ¡Nadie que quiera un "desarrollo sostenible" se carga la figura de suelo no urbanizable e inventa mil excusas para modificar el suelo rústico! Repito, ¡bullshit!
#10 Seguramente lo hagan de ese modo, aunque también es posible propagar este tipo de plantas cortando los retoños que salen a su alrededor, haciendo que enraicen y trasplantándolos, es decir, mediante lo que en botánica se denomina multiplicación vegetativa.
Otra cosa interesante, al hilo de tu pregunta, es que comúnmente las plantas monocárpicas se pueden mantener con vida tras su floración si se eliminan rápidamente las flores antes de que se formen las semillas, ya que es esto lo que lleva a morir a la planta por el exceso de energía que requiere. ¡Así que no está todo perdido!
¡Impresionante! Únicamente mencionar que la mayor parte de las plantas del género Agave son monocárpicas, esto es que florecen una sola vez en su vida y mueren tras la maduración de sus frutos, pasando desde la germinación hasta la floración un período de entre 10 y 30 años. Por tanto, no es algo específico de esta alucinante planta que se presenta en la noticia, sino que es lo común entre las piteras que estamos acostumbrados a ver distribuidas por nuestro territorio.
La corrección política típica de la izquierda que, por costumbre, tanto critican estos señores parece que ha resultado ser su piedra angular y, para comprobarlo, únicamente es necesario atender al concepto. Corrección: imposición de lo correcto/incorrecto + Política: por razones de poder entre la clase política = Imposición de una visión política sobre otra, normalmente, expresada a través de la censura.
Esta fórmula se emplea tanto a derechas como a izquierdas, pues se trata simplemente de una herramienta política más. En este caso concreto, se aplica la corrección política por parte de la derecha censurando a las personas no heterosexuales.
En definitiva, resultaría conveniente dedicar más tiempo a mejorarse a uno mismo y menos a criticar a los demás.
Un Abascal con máscara y capa al que le vale todo para acabar con la Dictadura Progre. Una Monasterio que comparte guarida e ideas con él mientras trata de acabar arquitectura. No saben muy bien cómo pero derrocan al poder. Todo termina con un gran boxing de Franco entre fuegos artificiales.
A veces me da la impresión de que la derecha me trata como a un niño más bien tonto. Me harta leer párrafos y párrafos en los que se me dice "esto está bien y esto está mal" sin dedicarme ni tan sólo un único por qué. ¡Bullshit!
Primero de todo, darle al autor la enhorabuena por el Plan. Es cierto que las grandes ideas a veces sorprenden y resulta comprensible todo el revuelo que llevan asociadas. Sin embargo, cabe recalcar que, lamentablemente, sin sostenibilidad no existe futuro posible, por lo menos con la tecnología con la que contamos actualmente. Partiendo de aquí, solo queda ponerse a buscar alternativas viables y, cuando se tengan, esforzarse por conseguir la voluntad política. ¡Bravo!
¿Estas personas son cazadores? No. ¿Son dos sinvergüenzas? Sí. ¿Son necesarias las animaladas como esta? Para nada. ¿Resulta la caza necesaria? Sí, siempre que ésta se entienda como un instrumento más para la gestión del medio natural y nunca como un puro divertimiento.
Casualmente, los países más ricos son los que más invierten en la transición ecológica, mientras que aquellos que están en vías de desarrollo aún no son capaces de permitirse dicha inversión por la priorización obvia de su subsistencia frente a la conservación del medio ambiente. Lo cual invita a pensar que para conservar hace falta actuar y para actuar hace falta dinero.
Igual el capitalismo no es una máquina perfecta de hacer dinero, pero ha demostrado que funciona bastante bien. La pregunta es: ¿podría ser más eficiente? Es decir, ¿podría generar riqueza suficiente con el mínimo impacto sobre el medio ambiente?
Tal vez para alcanzar este óptimo habría que incidir más sobre el modelo de consumo que sobre el capitalismo en sí mismo. Pasar de una economía lineal basada en producir, consumir y desechar a una bioeconomía circular donde esos mal llamados residuos se reincorporen a la producción podría ser el primer paso hacia una transición ecológica financiada por este sistema económico que tan poco nos gusta.
Por cierto, muy bueno eso de utilizar las herramientas de tus deidades sensacionalistas para desacreditarme diciéndome que disfruto disparando a animales. Es una lástima que, como parece ser costumbre en tu persona, te equivoques. No soy cazador, nunca he disparado un arma y he dedicado gran parte de mi vida a la conservación del medio natural a través de mi profesión como Ingeniero de Montes. Me queda la satisfacción de que la gente como yo somos los que tomamos las decisiones y no los charlatanes como tú.