¿Alguien ha leído la palabra 'cazador' en la noticia? Me parece imprudente el hecho de criminalizar a todo un colectivo en base a suposiciones.
Aquellos que, guiados por su sentimentalismo e hipocresía, buscan la humanización de los animales suponen un mayor riesgo para la vida silvestre que aquellos que ejercen por derecho la actividad cinegética. ¿Por qué? Porque el urbanita enamorado de los animales los quiere desde lejos, sin interaccionar en ningún momento con el medio natural.. vive en su burbuja urbana mientras cree proteger el medio ambiente con su 'buenismo' y su amor incondicional hacia aquello que realmente ignora. El cazador, sin embargo, es conocedor del medio en que se mueve y las limitaciones que éste presenta, así como los perjuicios que le puede suponer una actividad inadecuada.
Igual que el kamikaze en la carretera tiene la posibilidad de cometer graves imprudencias y se expone al riesgo de ser sancionado por la autoridad competente, el cazador malhechor está sometido al cumplimiento de las leyes y a una intensa vigilancia por parte del Cuerpo de Agentes Medioambientales. Igual que no todos los conductores son unos imprudentes y, por ello, no debemos prohibir la conducción de vehículos motorizados, no todos los cazadores son crueles asesinos y no debemos criminalizar ni prohibir la actividad cinegética.
Hoy en día se ha de exigir una mayor supervisión de la caza por la mayor sensibilización de nuestra sociedad, pero eludiendo en todo momento su prohibición. La caza es un instrumento de gestión de la naturaleza que tiene múltiples beneficios económicos, sociales y ambientales. Estos aspectos positivos siempre deben ser considerados por resultar fundamentales y nunca deben ser eclipsados por frivolidades.
Sin ánimo de ofender.
De parte de una persona que ha dedicado su vida a la gestión y a la conservación del medio ambiente.
Aquellos que, guiados por su sentimentalismo e hipocresía, buscan la humanización de los animales suponen un mayor riesgo para la vida silvestre que aquellos que ejercen por derecho la actividad cinegética. ¿Por qué? Porque el urbanita enamorado de los animales los quiere desde lejos, sin interaccionar en ningún momento con el medio natural.. vive en su burbuja urbana mientras cree proteger el medio ambiente con su 'buenismo' y su amor incondicional hacia aquello que realmente ignora. El cazador, sin embargo, es conocedor del medio en que se mueve y las limitaciones que éste presenta, así como los perjuicios que le puede suponer una actividad inadecuada.
Igual que el kamikaze en la carretera tiene la posibilidad de cometer graves imprudencias y se expone al riesgo de ser sancionado por la autoridad competente, el cazador malhechor está sometido al cumplimiento de las leyes y a una intensa vigilancia por parte del Cuerpo de Agentes Medioambientales. Igual que no todos los conductores son unos imprudentes y, por ello, no debemos prohibir la conducción de vehículos motorizados, no todos los cazadores son crueles asesinos y no debemos criminalizar ni prohibir la actividad cinegética.
Hoy en día se ha de exigir una mayor supervisión de la caza por la mayor sensibilización de nuestra sociedad, pero eludiendo en todo momento su prohibición. La caza es un instrumento de gestión de la naturaleza que tiene múltiples beneficios económicos, sociales y ambientales. Estos aspectos positivos siempre deben ser considerados por resultar fundamentales y nunca deben ser eclipsados por frivolidades.
Sin ánimo de ofender.
De parte de una persona que ha dedicado su vida a la gestión y a la conservación del medio ambiente.