Ayer os recomendé un hilo donde contaban las miserias de esta compañía. Os dejo aquí el extracto del usuario WAKAWAKA, que trabajó allí durante 2 años.
No sé por donde empezar.
Yo he tenido la penosa experiencia de trabajar dos años como asesor fiscal en palmatraz (Abengoa). Dejé mi trabajo en Telefónica, en Madrid, como asesor, para venirme a pasar la peor experiencia de mi vida a nivel laboral, y eso que estaba avisado de que aquello era un infierno.
Empecemos por el personaje que la gestiona. El Sr. Benjumea es un pirata del mundo político, que tenía una empresa familiar de contadores de la luz (heredada claro). Obtuvo, gracias a los contactos con el Opus Dei, préstamos multimillonarios sin mucha dificultad (Abengoa está endeudada hasta las cejas), y se dedicó, en parte, a investigar sobre productos relativamente útiles o inútiles (como se quiera ver) e hizo múltiples contactos con Gobiernos más o menos corruptos de países relativamente problemáticos. Por ejemplo, ahora ejecuta una planta en México (no recuerdo el Estado), esa planta va arrasar toda la plantación de la zona, va a necesitar mover a pueblos indígenas, y todo para montar una planta que ni el pueblo mexicano quiere, ni puede pagar. ¿Dónde está la pasta? De fondos internacionales, y parte, de México. La planta o instalación, ya que pagan otros, se pone un 25% más cara, para afrontar los sobornos a los Gobiernos de estos países. Luego los posibles beneficios de la planta están "embargados" debido a la pasta puesta por los fondos internacionales. México pone el territorio arrasado. La energía se seguirá vendiendo, y por lo tanto, los mexicanos pagando.
Benjumea es un personaje oscuro, nunca come con el resto en palmatraz. Come en su despacho de la quinta planta. Sube directo con su ascensor desde el garaje, con su guardaespaldas. Lleva un audi a8 blindado a toda velocidad por la zona de aparcamiento. Alguna vez ha estado cerca de atropellar algún amigo mio. Su lema es "hacer y