Seguramente hoy en día Platón trabajaría en telepizza y viviría con sus padres. Mientras la sociedad le diría ¿para que cojones te sirvió la filosofía?
Alejandro Magno sería un nini boirrachín aficionado al Total War, y Genghis Khan seguramente trabajaría para la CIA destruyendo paises por dinero.
Plauto se dedicaría el estilo de santiago segura a hacer pelis torrentianas, y viviría de sus colaboraciones en programas televisivos cutres.
Voltaire sería un intelectual francés fumado y aficionado al vino al que nadie lee ni hace caso.
Quevedo sería un perrofaluta con rastas de los que se manifiestan con los indignados.
Este tipo de comparación son interesantes, hace ya unos cuatro años me dio por hacer algo semejante para ver en comparación cuanto ocupa Tokio, sobre un mapa de Galicia, uno se da cuenta del tamaño relativo de las cosas al compararlas con lo que conoce mejor.