Documental sobre la masacre sionista de Deir Yassin de 1948, donde las bandas terroristas sionistas de Irgun y Lehi, asaltaron el poblado palestino de apenas 600 civiles y mataron a 350, más de la mitad de la población. En el film, los propios criminales sionistas recuerdan como asesinaron a árabes de manera terrible, como por ejemplo lanzar granadas de fragmentación dentro de casas civiles y luego entrar dentro a ametrallar a los heridos.

“Huían como ratas. Casa tras casa, poníamos explosivos y salíamos corriendo. Un explosión y… ¡adelante! Así, hora tras hora, en pocas horas no quedaba nada de la mitad del pueblo”. Muchos cadáveres fueron quemados allí mismo, y otro testigo de lo ocurrido, futuro ministro de Israel, contestó así cuando se le preguntó por ello: “Pensábamos que la Cruz Roja llegaría en cualquier momento y era preciso ocultar las pistas porque, si se publicaban imágenes y relatos de lo allí ocurrido, esto deterioraría la imagen de nuestra Guerra de independencia".

El uso secreto de armas biológicas y veneno por parte de Israel contra los palestinos durante la campaña de limpieza étnica de 1947/48 han sido revelados en un artículo reciente de los historiadores Benny Morris y Benjamin Kedar basado en documentos originales almacenados en el Archivo Estatal de Israel. Los científicos del Cuerpo Científico y otras unidades, participaron en una campaña sistemática para envenenar pozos de agua y propagar la bacteria tifoidea en ciudades árabes, así como entre los ejércitos invasores de Egipto y Jordania.

La Junta de Censura compuesta por cinco miembros del gabinete prohibió al ex primer ministro Yitzhak Rabin incluir en sus memorias un relato en primera persona de la expulsión de 50.000 civiles palestinos de sus hogares cerca de Tel Aviv durante la guerra árabe-israelí de 1948. Rabin atribuye la decisión final de la expulsión a David Ben-Gurion, uno de los fundadores de Israel y su primer Primer Ministro. El relato no aparece ni en la edición hebrea de las memorias del Sr. Rabin ni en la edición estadounidense.

La traumática historia de Deir Yassin, la aldea palestina situada cerca de Jerusalén que fue invadida, conquistada y vaciada por combatientes clandestinos judíos en abril de 1948, se cuenta a través de testimonios de primera mano de los combatientes judíos que participaron y de los jóvenes que fueron enviados a “fregar” y levantar” a los muertos.