En la década de 1930, Bandera fue condenado por ser coorganizador de asesinatos políticos en Polonia y solo fue liberado tras el inicio de la Segunda Guerra Mundial. Poco después se produjo una escisión en la OUN, tras la que Bandera encabezó el ala más radical (OUN-B). Cuando la Alemania nazi se preparaba para invadir la Unión Soviética, los compañeros de armas de Bandera se unieron a las tropas nazis con dos batallones ucranianos: "Ruiseñor" y "Roldán".

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, viajará este fin de semana a Polonia, donde participará, el próximo lunes, en el acto Anual en Recuerdo del Holocausto que organiza la Asociación Judía Europea en Auschwitz durante el 22 y 23 de enero en la ciudad de Cracovia y al que están invitados líderes políticos de la Unión Europea.

Radosław Tomasz "Radek" Sikorski; nacido el 23 de febrero de 1963) es un político y periodista polaco, ministro de Asuntos Exteriores de Polonia en el gabinete de Donald Tusk desde 2023. El 27 de septiembre de 2022, horas después del sabotaje del gasoducto Nord Stream 2022, Sikorski publicó en Twitter "Gracias, EE.UU." sobre una imagen de las fugas de gas que siguieron a las explosiones de los gasoductos Nord Stream 1 y 2.^[94]

Analizamos cómo han ido las elecciones municipales y autonómicas y cómo han afectado a los socialistas. Y es que el batacazo del PSOE ha sido tal que Pedro Sánchez (Pep Plaza) ha decidido dar un salto al vacío y convocar elecciones generales para el próximo 23 de julio.

El PP celebra que el líder de la Plataforma Cívica polada, Donald Tusk, pueda intentar formar gobierno pese a no haber sido su partido el más votado. De este modo lo ha justificado este lunes en rueda de prensa posterior a la reunión del Comité de Dirección Borja Sémper en calidad de portavoz mientras arremetía contra los soberanistas de Euskadi y Cataluña, defendiendo que, a diferencia de Sánchez, si el homólogo de los populares en Polonia consigue gobernar, lo hará para "fortalecer" la Constitución y la separación de poderes en el país.

Si Ley y Justicia (PiS) vuelve a ganar, Polonia terminará convertida en la segunda autocracia electoral en el corazón de la Unión Europea. Ya lo sabemos, las extremas derechas son hoy en día la mayor amenaza para los sistemas democráticos. Cada vez más partidos ultraderechistas llegan al poder en diferentes países e intentan transformarlos en “democracias iliberales” o, para ser más claros, en “autocracias electorales”.

La decisión alemana de imponer controles temporales en las fronteras de Alemania con Polonia y la República Checa en un intento de frenar la afluencia de solicitantes de asilo promete elevar las tensiones con el gobierno ultraconservador polaco. El ejecutivo de Olaf Scholz acusó esta semana a Varsovia de enviar ilegalmente a Alemania a más de 250.000 migrantes mediante un sistema de sobornos con las visas. En Alemania las peticiones de asilo en lo que va de año aumentaron un 77% respecto a 2022, con 204.000 en los 8 primeros meses de 2023.

La sentencia, dictada el martes por la fiscalía de Radom (centro), se refiere a los hechos ocurridos en 2020, cuando una mujer embarazada contactó con la clínica del doctor Slawomir W. con la intención de abortar, para lo que le pagó unos 900 euros.

El primer ministro de Polonia y Hungría, Mateusz Morawiecki y Viktor Orbán respectivamente, han mostrado este martes su apoyo al líder de Vox y candidato a la Presidencia del Gobierno español, Santiago Abascal, y han pedido el voto para su formación en las próximas elecciones del 23 de julio.

El euroescéptico ministro polaco de Justicia Zbigniew Ziobro, que es también Fiscal General del país, decidió liberar a una activista neonazi de 21 años condenada a 3 años de cárcel por agredir a una mujer en un acto LGTBI en 2020. Marika Matuszak y otros 3 radicales intentaron arrebatarle un bolso arcoiris mientras el Día del Orgullo en Poznań. Ella y otros 2 agresores le provocaron contusiones y esguinces en manos y muñecas. La pena de 3 años de cárcel era la mínima posible según el Código Penal polaco. Le quedaban aún 12 meses de condena.

Arrollan el estado de derecho, rechazan las normativas comunitarias, legislan de forma férrea contra el aborto, la homosexualidad o la inmigración y quieren un continente nacionalista, conservador, blanco y cristiano. Abascal anhela lo mismo.

Polonia afronta elecciones parlamentarias en septiembre, y por primera vez en mucho tiempo, el partido ultraconservador polaco Ley y Justicia (en sus siglas PiS) se encuentra contra las cuerdas. El motivo es la aprobación de la reforma judicial clave para no perder los 35 millones de euros de ayudas de Bruselas para la recuperación por la pandemia. Un tema que, por el momento, parece estar lejos de desbloquearse.

La muerte en un hospital polaco de una mujer embarazada de cinco meses, a la que, según la abogada de su familia, no se le practicó un aborto que podría haber salvado su vida, ha vuelta despertar la alarma entre mujeres con embarazos de riesgo y organizaciones feministas.