Una fuente militar declaró hoy a SANA que a las 1.45 de este viernes, 29 de marzo, “Israel” perpetró un ataque aéreo desde la dirección sudeste de la provincia Alepo. De acuerdo con la fuente, la agresión tuvo como blanco varios puntos en las zonas rurales de esta gobernación y causó la muerte y lesiones de varios civiles y militares, así como ocasionó pérdidas materiales en propiedades públicas y privadas. Este ataque coincidió con otro con drones llevado a cabo por organizaciones terroristas desde Idlib y la zona ubicada al oeste de Alepo,

Trump acusó a Obama de ser el fundador de la organización yihadista Estado Islámico.

¿Es una coincidencia que la principal organización terrorista del mundo esté reviviendo justo cuando Estados Unidos lucha bajo un asalto de múltiples frentes contra su hegemonía en Asia Occidental? Lo más curioso es que tanto el ISIS como los objetivos de Washington son exactamente los mismos. Fuentes iraquíes advierten de un resurgimiento del ISIS en el país, que coincide perfectamente con el repunte de las operaciones de la resistencia iraquí contra las bases estadounidenses en Irak y Siria, y con la creciente inestabilidad regional por Gaza.

El Gobierno ha decidido repatriar a las esposas y viudas de cuatro yihadistas del Estado Islámico (ISIS) y a sus hijos españoles, internados en campos de prisioneros bajo control de las milicias kurdas en Siria desde que en marzo de 2019 fue liberada Baguz, último reducto del Califato que Al Bagdadi proclamó en 2014 en Mosul (Irak), según fuentes gubernamentales. Se trata de cuatro mujeres (Yolanda Martínez, Luna Fernández, Lubna Miludi y Loubna Fares) y de 16 niños —el mayor, de 15 años; la menor, nacida ya en cautiverio, de solo tres—,

La guerra contra el terrorismo, esa campaña sin fin lanzada hace 14 años por George Bush, se enreda en contorsiones cada vez más grotescas. El lunes, el juicio en Londres de un sueco, Bherlin Gildo, acusado de terrorismo en Siria, se derrumbó después de que saliera a la luz que los servicios de inteligencia británicos habían estado armando a los mismos grupos rebeldes que el acusado estaba acusado de apoyar. La fiscalía abandonó el caso, aparentemente para evitar poner en aprietos a los servicios de inteligencia.

EEUU sabe desde 2014 que Arabia Saudí y Qatar financian al ISIS.