El capitán Pollaherida
ha perdido la partida.
La teniente Chochofrío
se planta con poderío
en medio de la avenida
y con recio desparpajo
le planta un escupitajo
al que valora su culo.
Ya da igual si es mula o mulo:
lo que de veras aporta,
lo que de veras importa
es que te da por el culo.
Y al final de su jornada,
se lo curre o no haga nada,
se rasque el coño o el nabo
sus amigas y su esclavo
la llaman EMPODERADA.