Dan y Mandy Sheldon, una pareja inglesa, acudió felizmente al registro civil de Chesterfileld, Derbys, que volvía a abrir tras el largo confinamiento. En brazos llevaban a su hijo de cuatro meses, que pretendían llamar Lucifer. Sin embargo, y para su estupefacción, la funcionaria se negó a registrar semejante nombre: «Nos dijo que nuestro hijo jamás conseguiría un trabajo con ese nombre y que los profesores no querrían tenerlo como alumno», explica Dan, el indignado padre.
|
etiquetas: lucifer , hijo , inglaterra , satán , registro , funcionaria , prohibido