Desde que supieron que estaban esperando un hijo, Luis y Sonia acordaron mantener el suspense y pidieron a sus médicos que no les desvelaran el sexo de su bebé. Así sería mucho más emocionante, pensaban. Si al final, qué más daba que fuera niño o niña, si le ve iban a querer igual… Así que empezaron por buscar nombre. Como no sabían qué sería y por no estar devanándose los sesos distinguiendo entre femeninos y masculinos, tiraron por la calle del medio: uno que sirviera igual para él que para ella.
|
etiquetas: nombres epicenos , igualdad de género