Las empresas Constècnia 3 y Eurocatalana eran las responsables de ejecutar un proyecto del Ayuntamiento de Barcelona en el que se utilizarían contenedores de barco reciclados para desarrollar un edificio en el que alojar a familias con escasos recursos económicos. Ahora, el edificio de la calle Sant Francesc está a punto de ser acabado. The Guardian ha definido los pisos como “latas de sardinas para pobres” y “barracones”. El proyecto del consistorio de la Ciudad Condal no se limitaba a este edificio. Hay proyectado dos más.
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