Los amantes de la croqueta están esta martes de celebración. Como cada año, el 16 de enero, tiene lugar el día mundial de uno de los productos gastronómicos más conocidos de la cocina española. Este manjar ha conquistado los corazones de niños, jóvenes, adultos y mayoresl.

Por el Día de la Croqueta, te desvelamos la lista de los tipos de croquetas que más comemos en España

La tienda de servicio de comida a domicilio Como en Casa ha ideado esta iniciativa para 'quitar el mal sabor de boca' a quienes no ganen ningún premio en el Sor

Con la conformación del nuevo Gobierno, las críticas políticas de Paniego han ganado en intensidad, hasta el punto de recibir ‘amenazas’ por parte de tuiteros que aseguran que no pisarán ninguno de sus restaurantes. Ante esta situación, el chef de Ezcaray ha anunciado una “contramedida” que va muy en serio: croquetas gratis para los autores de tuits “muy rojazos”.

La sevillana ha sido una de las jugadores clave en la victoria de España en el Mundial.

El periodismo no deja de sorprenderme. A veces me pregunto para qué sirven 4 años de carrera (antes 5). Para qué hacer un máster o unas prácticas. Para qué intentar tirar de contactos, para qué indagar en alguna noticia que te parezca relevante, para qué intentar hacer un reportaje que sobresalga y dé voz a los que no la tienen. Para qué esforzarte cada vez que tienes que hacer un artículo de opinión. Qué sentido tiene esta profesión hoy día cuando cualquiera puede ser periodista y la información más banal, falaz e interesada suele tener más re

Mara Jiménez en los últimos días ha sido objeto del boicot de varios personajes que han intentado (y conseguido gracias a algunos medios) conseguir atención, por la vía de pontificar sobre lo que no conocen. Todo comenzó el pasado 31 de mayo, aunque se ha hecho viral ahora. La influencer presentaba en la FNAC de Callao (Madrid) su último libro Más yo que nunca. Al evento se presentó un youtuber haciendo preguntas que lo que realmente buscaban era dar su opinión e intentar dar lecciones a los presentes. Tras un rato de tensión, acabaron pidi

La actriz declara su amor hacia la cocina española.

En España comemos casi 20 millones de croquetas al día. Y es el plato tradicional más pedido a domicilio. Para que os hagáis una idea de las dimensiones de la industria de la croqueta en nuestro país, hay que mencionar que en España se consumen 7.162 millones de croquetas al año y, de acuerdo con la Asociación Española de Fabricantes de Platos Preparados (Asefapre), el consumo anual crece un 9,4%. Eso quiere decir que comemos casi 20 millones de croquetas al día, 240 cada segundo.

La gastronomía es uno de los principales pilares de la cultura española, y cuando uno se va a vivir al extranjero la valora todavía más. Los más valientes (o inconscientes) se atreven incluso a buscar restaurantes de comida española en otros países. Una experiencia que puede ser del todo desastrosa, especialmente si hay paella de por medio.

Juan Monteagudo es especialista en verduras, caza y, desde ahora, en uno de los bocados estrella de nuestra gastronomía

Santiago Fernández, del restaurante El Álamo de Tapia, abrirá una fábrica para responder a la creciente demanda

Supuestamente introdujo benzodiacepinas en la tapa para intoxicar y hacer perder la consciencia a su expareja

Las benzodiacepinas son un potente narcótico legal que provoca somnolencia y que es empleado por los agresores sexuales para la conocida como sumisión química. Una vecina de Zaragoza decidió, supuestamente, copiar el uso de este fármaco para drogar a su exmarido y robarle nada menos que 27.000 euros. Lo hizo introduciendo esta sustancia en una croqueta. La mujer, M. B. L. G., de origen español y de 47 años, ha sido detenida como presunta autora de un delito estafa y otro contra las personas.

Las croquetas, esas porciones de masa de bechamel con picadillo de múltiples ingredientes rebozadas y fritas, son posiblemente uno de los platos universales que se pueden encontrar en culturas de todo el mundo, con sus distintas variantes. Sin embargo, no las hay más exclusivas que las que vende la carnicería 'Asahiya', en la ciudad de Takasago al oeste de Japón.

Croqueta, luz de mi vida, fuego de mis entrañas. Pecado mío, alma mía. Cro-que-ta: la punta de la lengua emprende un viaje de tres pasos paladar abajo hasta apoyarse, al tercero, en el borde de los dientes. Cro. Que. Ta. Bueno, salvo que esté quemando, porque unas croquetas recién hechas alcanzan temperaturas similares a las que vivieron en Pompeya, y entonces ni paladar, ni labios, ni hostias, solo tener la boca abierta, así, y el trozo de masa ahuecado sobre la lengua mientras jadeas como un perruco. Más o menos.

La presencia del barco en L'Alguer ha causado todo tipo de comentarios y risas.

Es un hecho. No comemos de la misma forma. En el último año, muchos hogares se han convertido en auténticos restaurantes con elaboraciones y recetas dignas de la alta cocina. De hecho, 8 de cada 10 españoles afirma que cocina al mediodía todos o casi todos los días, según datos del último estudio de Aecoc Shopperview. Además, este trasvase de consumo al hogar ha provocado que la compra de platos preparados también aumente. Actualmente, un 43% de los consumidores opta por esta opción al menos una vez a la semana.

La croqueta, elaborada a base de bechamel con leche de oveja de la Granja Calaveruela y mantequilla, jamón Joselito y rebozado de panko (copos de pan seco), la sirven presentada en un plato que imita a una servilleta de bar y cuesta 3,5 euros.

La mejor croqueta de jamón se puede degustar en el restaurante Cañitas Maite de Casas-Ibáñez, en Albacete, de la mano de los chefs Javier Sanz y Juan Sahuquillo

A Vox no le gusta aquello que tenga que ver con las políticas dirigidas a la mujer o la igualdad. No lo oculta. Es más, si tiene ocasión, incluso las ridiculiza.

El chef Chema Soler nos orienta para celebrar la jornada por todo alto, ¡hasta en el postre!

Fue el aristócrata francés Louis de Bechamel, encargado de la cocina del rey Luis XIV, quien marcó el preludio a la creación de esta clásica tapa. El “padre” de las croquetas trabajaba como recaudador de impuestos y era superintendente de la casa del duque de Orleans. Pero, aunque la salsa bechamel lleve su nombre, no fue más que una dedicatoria o halago hacia su persona, como a menudo hacían los cocineros para la nobleza de la época.