"La tensión sexual, el deseo sexual, considero, proporcionan una satisfacción instantánea y, con frecuencia, conducen a muchas complicaciones (...) En algunos casos hay suicidios, muertes", explicó el jefe espiritual de los tibetanos durante una entrevista concedida con ocasión de una visita particular a Nigeria. En un hotel de Lagos, el Dalai Lama declaró que la vida de pareja está llena de "altos y bajos". "El deseo, cuando no es carnal, es un sentimiento sin el cual la vida no tendría sentido", añadió el premio Nobel de la Paz.