Compuestos entre 1718 y 1720, los Conciertos de Brandemburgo suponen la culminación de la incursión de Bach en el concerto italiano. Fueron compuestos durante los años de residencia del compositor en Cöthen, al servicio, como maestro de capilla, del príncipe Leopoldo, por encargo de Christian Ludwig, margrave de Brandemburgo, a quien fueron dedicados por Bach.