De verdad, de verdad, de verdad que no queríamos escribir este artículo. De verdad. Pero el periodismo de servicio público tiene estas cosas así que aquí va: por favor, no te laves la vagina con 'Listerine' ni ningún otro enjuague bucal. Aunque lo hayas leído en la cuenta de alguien que se presenta como médico. Por favor, no lo hagas.

El doctor lanzó un cuestionario de preguntas por Instagram y dio el consejo para practicar sexo oral en las mujeres.

Varios médicos alertaron de que no es seguro usar Listerine para la vagina

Me ponéis esto todo el rato y estáis en lo cierto al relacionarlo con la listeria. Se llama así por Sir Joseph Lister, cirujano inglés del siglo XIX que supo por qué las heridas abiertas de los Pacientes se infectaban. ¿Y eso qué tiene que ver con el listerine? Relacionada: www.meneame.net/story/joseph-lister-ha-salvado-mas-vidas-ninguna-otra-

Si eres uno de los que tiene el talón más seco y rasposo que una espardeña lee con atención las siguientes instrucciones. Mezcla, en un barreño, un vaso de agua caliente, medio vaso de Listerine y medio de vinagre blanco, introduce los pies y déjalos durante 15 o 20 minutos. Si por el contrario eres de los que buscan esta clase de trucos porque tienes hongos en la zona de las uñas de los pies lo único que necesitas es Listerine.

¿Usas Listerine para eliminar las bacterias que causan el mal aliento? A comienzos de siglo lo usaban para desinfectar el suelo e incluso se vendió para aplicarlo en zonas algo más privadas. Esta es la extraña historia del Listerine, un producto que se vendió hasta en forma de cigarrillos. Debe su nombre al doctor británico Joseph Lister, un pionero en el uso de antisépticos en cirugía, pero no lo inventó él. Su invención se atribuye a Joseph Lawrence, un químico de Saint Louis, Missouri.

Cientos de estafados por una promoción de Listerine. Les obligan a comprar un producto de marca Listerine y a través de retos sencillos y de corta duración pueden conseguir una tarjeta visa de 50€ . Tras ver que hay una gran cantidad de usuarios que han conseguido la Visa y que están en proceso de ello, cambian las bases de la promoción y amañan ciertas pruebas para que no se consiga ganar. La empresa no se ha pronunciado de momento y los usuarios no tienen respuesta por ningún medio.

Listerine promueve un concurso, en el cual tras la compra de uno de sus productos debes hacer retos durante 21 días. Los retos son secillos y rápidos. Los premios incluyen una tarjeta Visa regalo de 50€ . Tras ver que es todo un éxito y que han superado el público esperado, deciden amañar el concurso y hacer imposible que se ganen esos 50€. Cientos de estafados por la red.

La gente se envenena la boca con amoniaco durante 21 días, y por el camino Listerine les cambia las reglas del juego. Ver para Creer.

Hay empresas que se dedican a sectores totalmente ajenos entre sí, ya sea por alguna fusión, por ampliación de gama o por cualquier otro motivo histórico. Así encontramos a grandes grupos como Unilever que fabrican tanto helados como desodorantes o champús; o Procter & Gamble que fabrica desde afeitadoras hasta lavavajillas. Sin embargo, cuando hablamos de branding, lo más habitual es que cada una de estas líneas de negocio reciban una marca distinta con diferentes posicionamientos, namings e historias que contar al consumidor. En ocasiones se

El Listerine fue bautizado así en honor al cirujano británico sir Joseph Lister, que en el siglo XIX introdujo drásticas medidas sanitarias en los quirófanos. Pero su creador fue otro médico, Joseph Lawrence, de Missouri, que lo presentó en 1880 y acabó siendo en uno de los productos más usados para enjuagues y gárgaras. Fue vendido como antiséptico quirúrgico y luego como desodorante, loción anticaspa y loción para después de afeitar. Incluso se usó para fregar suelos. Pero el gran éxito llegó cuando empezó a venderse como enjuague bucal.