El domingo Nvidia presentó en el CES de Las Vegas el Tegra K1, un procesador móvil de 192 núcleos, calificado por su consejero delegado Jen-Hsun Huang como "el avance imposible". El fabricante de procesadores, que nació especializándose en el sector de las videoconsolas, quiere penetrar en el mundo de los smartphones, donde domina Qualcomm, mientras el clásico Intel intenta apuntarse a la movida. En la presentación del domingo, Nvidia confesó que ellos eran los autores de un misterioso dibujo aparecido en unos campos de cereales de California.