Los batiscafos tripulados rusos Mir-1y Mir-2 protagonizaron hoy una nueva hazaña al descender 1.680 metros hasta el fondo del lago siberiano Baikal, el más profundo del mundo. "Este es un nuevo récord mundial en inmersión de sumergibles en agua dulce", aseguró exultante un miembro de la expedición que seguía las evoluciones de los Mir desde un monitor de televisión, citado por las agencias rusas. Hasta ahora, la profundidad del lago siberiano, que acoge la quinta parte de las reservas de agua dulce del planeta, se estimaba en 1.637 metros.