Tanto quejarse Rajoy de la herencia recibida de Zapatero, cuando la que de verdad le aplasta desde hace años es otra herencia también recibida: la herencia dejada por Aznar. Dicen que ahora, con la salida de algunos ex populares hacia Vox, el desplante ruidoso de Aznar, y el alejamiento de una parte de las víctimas, es cuando Rajoy rompe de verdad con el pasado y podrá caminar algo más ligero. Pero claro, el drama de Rajoy es que nunca terminará de alejarse del todo, porque él mismo es parte de esa herencia recibida.