El escándalo tiene forma de hamburguesa. Al frente de la nueva polémica que sacude a Francia, en pleno debate sobre su identidad nacional, está una cadena de comida rápida que desde otoño experimenta con menús exclusivamente «halal», es decir, elaborados con carne de vaca, pollo o pavo sacrificados conforme a lo establecido por la «sharia». Como estipula la ley islámica, el degüello del animal se efectúa por un verdugo autorizado, invocando a Alá y mirando a La Meca. Esta oferta comercial sólo afecta a ocho de los 360 establecimientos...