...«Recuerdo la primera vez. Tenía tres o cuatro años y, cuando se tumbó sobre mí, le intenté apartar con mis piernas y me pegó». Lo hizo muchas veces más. Nadie la creyó. En 2003 una paliza la llevó al hospital. Estuvo 45 días ingresada sin poder moverse. «La razón fue que no quise ver una película con él». Cuando tenía quince años, fue con una amiga a la Comisaría a contar lo que pasaba. Tampoco la creyeron. En su casa de Colloto le decían que la internarían si no dejaba de decir «bobadas», «que los trapos sucios se lavaban en casa»
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