Los talibanes lo han vuelto a hacer: implantar una prohibición casi total del cultivo de adormidera -el producto agrícola más importante de Afganistán- repitiendo su prohibición de 2000-2001, que tuvo un éxito similar. Pero hay que evitar la tentación de ver la prohibición actual de forma excesivamente positiva, como una importante victoria mundial en la lucha contra los estupefacientes. Esto es especialmente cierto dado el estado de la economía afgana y la situación humanitaria del país. De hecho, la prohibición impone enormes costes económico
|
etiquetas: prohibición , opio , talibanes , afganistán , mundo