"Un movimiento mundial desafía el culto a la velocidad". Este es el acertado subtítulo del libro. Y digo acertado porque acuña un concepto que todos hemos pensado en algún momento u otro: el culto a la velocidad. ¿Quién no se ha quejado de las prisas que le llevan de un sitio para otro? Vivimos en un mundo donde el tiempo se nos escapa de las manos y donde la productividad contra-reloj es la guía de nuestras vidas. Carl Honoré es el periodista canadiense que ha tenido el acierto de detectar esta necesidad desatendida y dar respuesta.
|
etiquetas: elogio , lentitud , carl honoré , libro reseña