Desde los 7 u 8 años sabía que tenía una Misión. Sentía claramente que no estaba en esta realidad como turista o como figurante. Algo sumamente importante tenia hacerse, y yo era el que lo tenía que hacer.
Pasé días, semanas, años... esperando la revelación de mi tarea. Y trataba de prepararme, pero no sabia como prepararm..Me apunté a Karate, a Yoga, al curso de Lladós y al de el Xocas....
Viajé. Cogí mi mochilla y viaje al Nepal. A Bali. Estuve en los alrededores de Badajoz. En Cincinati.
Y llego el dia. Llego el dia en que entré en Meneame.
Este antro, lleno de gente con opiniones equivocadas. Este sitio donde la ley de la verdad ni se respeta ni se la espera. Este lugar inhóspito, el paraíso de los comentarios diabólicos, de las votaciones absurdas (anticostitucionales algunas) . Sin más ley que unos moderadores engendrados en el mismísimo Mordor... Ahí... Ahí estaba mi Misión: corregir a toda esta gente equivocada. Voto a voto, comentario a comentario, con paciencia, como debe de tratarse a los poco solventes, por decir poco.
Este es el Trabajo, sin duda, la Misión. Rezo con todas mis fuerzas a Dios, para que me de fuerzas en mi Misión.
Ten piedad, Monesvol, porque no saben.