La vaca, la cabra y la oveja, acostumbrada a sufrir la injusticia, formaron sociedad con el león en los bosques. Como hubiesen capturado un ciervo de gran tamaño, el león, hechas las partes, habló de este modo: «Yo me llevo la primera, en virtud de mi título, pues se me trata de rey; la segunda, porque soy copropietario , me la otorgaréis a mí; luego, porque soy más poderoso, la tercera se vendrá conmigo; si alguno intenta tocar la cuarta, lo pasará mal»
Esopo