La política americana se ha desplazado hacia una de esas regiones brumosas situadas en áreas remotas de las constituciones, la parte del articulado que nadie quiere nunca utilizar. El impeachment, o proceso de destitución presidencial, es una procedimiento inusual, uno de esos preceptos que académicos y aficionados a la política ficción gustan de imaginar pero que nadie quiere ver en la práctica.

La Constitución de EE.UU detalla en su artículo número 1 (tercera sección, cláusula sexta) que, tras ser acusado de un delito grave ("traición, soborno u otros"), todo alto cargo del Gobierno puede ser sometido a un juicio político que puede acabar en su destitución. Un proceso que, tratándose del huésped de la Casa Blanca, requiere la implicación del Congreso y también del presidente de la Corte Suprema.

La presidenta de la Cámara de Representantes de EE UU, la demócrata Nancy Pelosi, ha anunciado que el Congreso iniciará un juicio político o impeachment contra el presidente Donald Trump. El último escándalo político que ha puesto en el punto de mira a Trump ha sido la conversación telefónica en la que el mandatario estadounidense habría supuestamente coaccionado al presidente ucranio para que investigase al hijo del exvicepresidente Joe Biden.

La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, ha anunciado una investigación de juicio político formal contra el presidente Trump, un cambio dramático por parte de la líder demócrata que establece un choque constitucional y político que enfrenta al Congreso contra el presidente ejecutivo de la nación.

Un 40% de los estadounidenses cree que el reporte de Mueller sobre la trama rusa no ha absuelto al presidente Donald Trump de posiblemente haber cometido alguna irregularidad, indica una nueva encuesta de la cadena NBC News y el diario Wall Street Journal. La misma revela que el 31% no está seguro si Trump ha sido absuelto y el 29% dice que sí ha sido librado de acusaciones de irregularidades en su contra.

Un efecto colateral de las cuatro páginas que entregó el Departamento de Justicia al Congreso resumiendo el trabajo del fiscal especial Robert Mueller en su investigación sobre la influencia de Rusia en las elecciones de 2016 y la ahora negada conexión con la campaña republicana es que debilita los planes (o esperanzas) de algunos demócratas en el Congreso de someter a impeachment al presidente Donald Trump.

El artículo de portada de la edición de marzo de The Atlantic que se publicó en línea el jueves, trae también una imagen de la portada de la edición de marzo de la revista, que dice “IMPEACH” en letras grandes y rojas. “Es hora de que el Congreso juzgue la aptitud del presidente para servir”, dice el subtítulo. Un “impeachment” es un juicio político que tiene lugar en el Congreso para analizar y decidir la posible destitución del presidente de Estados Unidos.

Un grupo de afiliados del Partido Demócrata miembros de la Cámara de Representantes [Cámara Baja del Congreso] de EE.UU. han presentado este miércoles una serie de acusaciones contra el presidente del país, Donald Trump, informa el periódico The Hill. Su objetivo es el 'impeachment' del mandatario.

Un grupo de seis representantes del Partido Demócrata ha anunciado la presentación de numerosos documentos para la destitución de Donald Trump, siendo éste el mayor intento de apartar al presidente de su cargo. Esta acción ha sido liderada por Steve Cohen, representante por Tennessee, mostró su intención de iniciar el proceso de destitución tras las controvertidas declaraciones del presidente afirmando que "ambos bandos son culpables" tras los violentos actos de la marcha nacionalista blanca en Charlottesville, Virginia.

Donald Trump podría estar a solo seis votos de ser procesado, a medida que sigue enajenando alguno de los apoyos con los que contaba. Entre los republicanos dispuestos a poner en marcha el llamado "impeachment", el excandidato John McCain, que ha sido crítico con él en público y participó en el fracaso del presidente a la hora de sustituir el Obamacare.

Los abogados de la Casa Blanca empezaron esta semana a preparar el terreno para un proceso de destitución del presidente, conocido en Estados Unidos como "impeachment", aunque es una posibilidad que todavía ven remota.

Cómo sería el proceso de destitución de Donald J. Trump en un país diseñado para que nadie abuse del poder.

Al Green, representante del distrito 9 de Texas, presentó la primera solicitud formal ante el congreso de EEUU para que se haga un juicio político contra Trump argumentando que obstruyó la justicia al pedir al FBI que detuviera la investigación de un excolaborador de la Casa Blanca. Green aclaró que no presentaba esta solicitud basado en intereses políticos sino porque considera que ‘la democracia está en riesgo’ al tiempo que instó al congreso a que no permita que las acciones del presidente pasen inadvertidas.

Trump está tratando de gobernar por impulsos, por caprichos, por recompensa personal, por beneficios, por decretos… como si hubiera sido elegido dictador. Pero resulta que no funciona y que la máquina ya está descarrilando sólo UNA SEMANA después.

Trump podría estar traicionando a su país si, considerada Rusia como una nación enemiga, se determinara que el magnate ha tratado de entorpecer las investigaciones por el “Putingate”. “Tener una buena relación con Rusia es algo bueno, no malo”, tuiteó horas después de saber que Putin manipuló el proceso electoral a su favor.

Análisis de la destitución de Dilma Rousseff más allá de la "traición" de sus aliados en el gobierno. Se cierra un ciclo en Latinoamérica y conviene repensar y ser críticos con los fallos de los gobiernos progresistas más allá de los ataques que reciben de las fuerzas opositoras. En el artículo se habla también del rápido giro ideológico del nuevo gobierno y cómo este se está articulando.

El impeachment en Brasil y la presidencia de Michel Temer ha comenzado a notarse en medidas sociales como los derechos laborales. El excoordinador del Foro Social Mundial, Jeferson Miola habla de estos cambios y de las posibilidades para los movimientos de oposición al golpe.

La presidenta de Brasil es dimitida de su cargo por 61 voyos a favor y 20 en contra.

Comienza la fase final del juicio para la destitución de la presidenta Dilma Roussef, suspendida desde el pasado 12 de mayo de sus funciones. Será declarada culpable si 54 de los 81 senadores votan a favor, una cifra que según varios analista los pronósticos apuntan que ya se supera (en una consulta realizada el pasado 9 de agosto 59 senadores votaron a favor de la salida de la excombatiente). Acusada de graves irregularidades fiscales, la sentencia se pronunciará el próximo miércoles, después de que Rousseff presente sus alegaciones el lunes.

En una carta abierta al pueblo brasileño, la presidenta Dilma Rousseff hizo el martes un llamado agónico para que el Senado extinga el proceso de impeachment.

El Senado de Brasil ha decidido este miércoles seguir adelante con el proceso de 'impeachment' contra la presidenta suspendida, Dilma Rousseff, a quien enviará a un juicio político por presuntas irregularidades contables.

Romero Jucá, el ministro de Planificación de Brasil y senador del Partido del Movimiento Democrático de Brasil (PMDB), habría prometido al expresidente de la compañía Transporto, Sérgio Machado, un pacto para frenar la investigación por blanqueo de dinero conocida como 'Operación Lava Jato (que investiga a ambos) en caso de lograr la suspensión de la presidenta Dilma Rousseff, informa el diario 'La Folha de S. Paulo'. El diario apunta a la existencia de unas grabaciones de 75 m. de duración, obtenidas por la Fiscalía General de la República.