Los reguladores de California han revocado la licencia tras determinar que sus coches sin conductor son una amenaza peligrosa. Esa aprobación se produjo tras un coro de protestas, entre ellas las de la policía y los bomberos, que afirmaron que los vehículos sin conductor habían obstaculizado el tráfico en situaciones de emergencia durante una fase de pruebas. La preocupación alcanzó un nuevo nivel a principios de este mes, después de que un robotaxi atropellara a un peatón que había sido golpeado por otro vehículo conducido por un humano.

Las autoridades de California revocaron la licencia de un servicio de robotaxi propiedad de General Motors después de determinar que sus automóviles sin conductor que recientemente comenzaron a transportar pasajeros por todo San Francisco son una amenaza peligrosa. El DVM no dio más detalles sobre los motivos específicos de la suspensión, pero la medida llega después de una serie de incidentes que aumentaron las preocupaciones sobre los peligros e inconvenientes causados por los robotaxis de Cruise.

Algunas compañías como Waymo o Cruise están lanzando servicios de robotaxi en ciudades de EEUU, tratando de expandir tanto sus horas de operación como su territorio. Al principio, la empresa no sabía lo que estaba pasando y sospechaban que alguien estaba colocando conos en los capós de los coches para indicar que estaban apagados y no al revés. Pero lo cierto es que más tarde descubrieron que un cono en el capó convierte inutiliza los vehículos. Al parecer, el cono bloquea los detectores LIDAR del techo de los coches, por lo mismo que un conduc

San Francisco se ha convertido en un enorme banco de pruebas a escala real de los coches autónomos sin conductor. Las hazañas y problemas que causan los robotaxis de Cruise (General Motors) o Waymo (Alphabet, es decir, Google) son elementos recurrentes. Y en la ciudad del norte de California ya no solamente los bomberos, que ven cada día como esos coches les impiden trabajar correctamente, se están empezando a hartar de los taxis sin conductor.

Waymo solicita una licencia para crear un servicio de taxis en Phoenix (Arizona) que le es concedida de manera prácticamente inmediata.