El pasado 26 de julio, con agosticidad y alevosía como se suele decir, y con los y las vecinas despertando de la resaca de las paellas de Aixerrota, el pleno municipal de Getxo confirmó la aprobación provisional del futuro Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). Este documento, en la medida que estructura el futuro desarrollo urbanístico, social y demográfico del municipio, supone un error histórico que destruirá los últimos entornos rurales, permitirá lucrativas operaciones inmobiliarias y aportará pocas o ninguna solución al problema.