El tren, un coloso de 35 vagones, inició el viaje el 3 de junio casi desde el otro extremo del mundo. La estación de partida era la ciudad de Yiwu, en el oriente de la oriental China, y la semana pasada llegaba al sur de Madrid, a la terminal logística de Abroñigal, cargado de material sanitario anti-Covid. La Yiwu-Madrid es la línea comercial de tren más larga del mundo y ahora también pretende ser clave en la importación de material sanitario para combatir la epidemia, o para estar preparados para las próximas.