En tres barriadas –Ciudad Antigua, Navas y Lejero– apenas queda ya un vecino joven. Se calcula que sólo de estos puntos han salido más de mil hacia España. Lo mismo sucede en dos zonas rurales próximas, como son Hiada y Oulad Skhin. «¿Qué futuro espera a esta ciudad si quienes tienen que protagonizarlo se marchan?»

Un tribunal marroquí condenó recientemente a un asno que transportaba un alijo de hachís a ser vendido en una subasta pública, según relata hoy el portal lesiteinfo.com, que no duda de calificar el veredicto como algo único en el mundo. Los hechos juzgados tuvieron lugar en Larache, después de que un hombre fuera interceptado por la Gendarmería mientras transportaba un cargamento de hachís en su burro. El juez que procesó al traficante consideró que el asno era algo más que elemento probatorio, y lo condenó a su vez a ser vendido

El hombre, según fuentes policiales, manejaba la máquina de uso manual mientras su pareja se encontraba en las proximidades. En un momento dado, al filo de las 17.00 horas y en medio de unas zarzas, el disco de la máquina se topó con unos cristales. El impacto del tambor giratorio se produjo de tal manera que un fragmento de vidrio salió proyectado a gran velocidad hacia la posición que ocupaba la mujer, con tan mala fortuna que se le clavó justo en la yugular.