Sí, una vez más, un elemento de una película de ciencia ficción se ha convertido en realidad: The Sarco, una máquina con pinta de cabina de rayos UVA inventada por un médico australiano defensor del derecho a morir dignamente, te da matarile con gas a los cinco minutos de haber apretado el botón de «¿desea continuar?». Además, no te vas a morir construyéndola, basta con tener en casa una impresora 3D.