Lara dejó los hospitales públicos para empezar a trabajar en una clínica privada pese a que “el sueldo era vergonzoso”. “Primaba para mí tener un contrato más largo que dos meses y me prometieron que me harían indefinida. Yo quería comprar una casa y necesitaba esa situación laboral para poder pedir una hipoteca”, cuenta. Tras unos meses en la privada, se formó en oncohematología y se reconcilió con la profesión. Pero la pandemia hizo saltar todo por los aires. La colocó “al límite” y disparó su salida fuera de los hospitales. “No quería ni san

Las últimas conclusiones de la primera entrega del Informe Bienal 2024 de la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (Sespas) arrojan un resultado nada alentador para la Sanidad Pública en nuestro país. España es un "importador neto" de médicos y presenta altas tasas de facultativos en comparación con otros países desarrollados, si bien un 30 % ejerce en exclusiva en el sector privado, mientras que las enfermeras, además de pocas, acaban marchándose o abandonando la profesión lastradas por la precariedad.

El compromiso surgió de la reunión entre la ministra Mónica García y el conseller de Salut, Manel Balcells, tras el que el conseller dio el titular, concretando que se desarrollará a lo largo de 2024. “Tenemos el compromiso de reclasificación y retribución de las categorías sanitarias en 2024″ Esto comporta una gran diferencia salarial: El subgrupo funcionarial A2 cobra 14.992,66 euros brutos al año, mientras que el subgrupo A1 recibe 17.049,72 euros brutos. También cambian las cuantías de los complementos, los trienios o las pagas extra

La situación de las mujeres embarazadas y los recién nacidos en la Franja de Gaza va más allá de lo imaginable y exige medidas intensificadas e inmediatas. La ya precaria situación de mortalidad infantil y materna ha empeorado a medida que el sistema de salud colapsa. Las madres se enfrentan a desafíos inimaginables para acceder a atención médica, nutrición y protección adecuadas antes, durante y después del parto.

La Administración dice que pasó el pico de la gripe pero lo cierto es que sanitarios de varios servicios de urgencias como el de Vigo o el de Santiago insisten que continuan los atascos. En el Cunqueiro de Vigo las enfermeras alertan que tienen que pedir la colaboración de los familiares para que las avisen si pase algo porque hay tantos enfermos aparcados en lugares improvisados que ellas no los pueden vigilar físicamente.

El comunicado se emite en un contexto profesional en el que los enfermeros reclaman mayores competencias y protagonismo en el sistema sanitario puesto que "ya no son diplomados, sino graduados, igual que los médicos". Sin poner en duda esta afirmación, los médicos andaluces representados en este sindicato afirman que el "error es pensar que el crecimiento profesional de la enfermería puede hacerse suplantando las competencias del médico".

El consejero de Salud, Manel Balcells, pone como condición para recibir él personalmente al sindicato Enfermeras de Cataluña que pare la huelga indefinida que ha convocado y que ya suma doce días. En una entrevista con la ACN, Balcells pide una «tregua» para encontrar un «espacio de diálogo adecuado» y «abordar las reivindicaciones profesionales». «En una huelga en activo es difícil que las pueda recibir sin ir en detrimento de los otros sindicatos. Si hubiera un paro de la huelga sería más fácil, permitiría abrir este diálogo», dice.

¿Por qué aquí hay 3,2 enfermeras por 1.000 habitantes, en Portugal 7 y la media de la UE es más de 8? El SERGAS alega que faltan profesionales, algo que desmiente la avalancha de aspirantes a las oposiciones. Unas oposiciones que, según dice SATSE, este año solo cubren las plazas necesarias para sustituir a las que se jubilan. Con todo, las cifras de Galicia son peores que las de nuestro entorno. Según SATSE en Galicia hay unas 3,8 enfermeras por 1.000 habitantes. Según la OMS, en España hay 6, en Portugal 7 y en Francia 8.

Así, establecen sus líneas rojas en la conducta "negacionista" de "las instancias superiores" de Sanidade, donde se niegan a ver "los problemas más que evidentes de las condiciones laborales de su personal". "Tenemos un problema grave en la sanidad pública y no pueden seguir negándolo ni dándonos la espalda", sostienen. Otro punto que genera malestar en el sector es la "falta de transparencia en los llamamiento y contratos ofertados" por parte del SERGAS.

Falta de enfermeras disponibles para cubrir ausencias del personal de plantilla fija, como vacaciones o días de descanso, reduce la calidad de la atención sanitaria. Aseguran que gestión del Servizo Galego de Saúde (Sergas) se ha caracterizado por la improvisación, lo que tiene un impacto negativo en la atención que se ofrece a la población. Entre las consecuencia sde estas políticas están, dicen, el aumento de la actividad privada y la emigración de profesionales de la salud fuera de la región e incluso del país.

Casi un 25 por ciento de las personas que fallecen hoy en España necesitan atención paliativa, un dato que llegará hasta el 50 por ciento en 10 o 15.

La salud mental del personal sanitario en España se resiente cada vez más. La falta de profesionales, con ello, la sobrecarga horaria, y con ella la incapacidad de conciliar; todo aderezado con unos salarios muy poco atractivos, bastante alejados de la media de la mayoría de los países de Europa. Noruega y Bélgica, que ocupan la segunda y tercera posición del ranking mundial, se posicionan como líderes de Europa.

La Fiscalía del Principado de Asturias solicita la condena de un acusado de increpar y agredir al equipo médico, compuesto por dos hombres, que acudió a su domicilio en Turón por una urgencia de su pareja. El supuesto agresor quería que la atendiera una mujer. El fiscal pide un año y medio de cárcel por un delito de atentado. La vista oral está señalada para el 25 de septiembre, en el Juzgado de lo Penal número 3 de Oviedo, a las 9.30 horas.

Cerca de 45.000 enfermeras han solicitado al Ministerio de Seguridad Social poder acceder a la jubilación anticipada voluntaria, una reclamación presentada por el Sindicato de Enfermería, SATSE, en 2021 y que "está fundamentada en los estudios que demuestran cómo las difíciles condiciones laborales de estas profesionales afectan a su salud y a la atención que se presta a las personas".

Según se detalla en la sentencia, habría dado medicamentos no recomendados para la edad de la menor desde los 18 meses y hasta los cuatro años, con la intención de culpar al padre de la conducta. El tribunal añade que, al ser enfermera, conocía que estas sustancias están totalmente desaconsejadas en menores de tan corta edad, puesto que «dos de ellas afectan al sistema nervioso, llegando una de ellas a poder afectar al crecimiento del corazón». Otra es un fármaco opioide utilizado como analgésico narcótico y que causa grave daño a la salud.