“Dos de los robots, que cortaban piezas de automóviles a partir de piezas de aluminio recién fundidas, fueron desactivados para que el ingeniero y sus compañeros pudieran trabajar con seguridad en las máquinas. Un tercero, que agarraba y movía las piezas del coche, quedó operativo sin darse cuenta, según dos personas que presenciaron lo sucedido. Mientras ese robot realizaba sus movimientos normales, inmovilizó al ingeniero contra una superficie, hundió sus garras en su cuerpo y le extrajo sangre de la espalda y el brazo, dijeron