El sábado por la tarde, cuando la tormenta azotaba Gijón y las calles se inundaban, un espóntaneo saltó a la calle en calzoncillos. Descalzo recorrió la acera y la carretera ante la mirada atónita de un vecino que grababa la escena. El vídeo que acompaña a estas líneas recoge ese momento, su carrera y el momento en el que imita a un nadador tirado en el suelo.