Inundaciones repentinas causadas por lluvias estacionales inusualmente intensas en Afganistán han matado a más de 300 personas y destruido más de 1.000 casas, dijo hoy la agencia alimentaria de Naciones Unidas. Indicó que estaba distribuyendo galletas enriquecidas entre sobrevivientes de una de las muchas crecidas. Baglán es la más afectada por los aguaceros del viernes. En la vecina provincia de Tahar reportaron que murieron al menos 20 personas. Badajshán, Baglán, Gaur y Herāt son las provincias más afectadas, con una "extensa devastación".