Las grandes tecnológicas norteamericanas concentran el grueso de su facturación europea en países con baja tributación para sortear los altos tipos de sociedades que existen en países como Bélgica o Francia, donde supera el 35%, o Alemania, donde ronda el 33%. Google, Amazon, Facebook y Apple, que están bajo la lupa de la Unión Europea (UE) por su estructura para reducir el pago de impuestos han facturado más de 208.700 millones de euros a través de Irlanda, Luxemburgo y las Islas Bermudas, tres países con grandes incentivos fiscales.