Rey criticaba que “haya un medio de comunicación como el que haya comprado las imágenes y las emita”. “Si esa persona está cometiendo un delito al grabarme, la persona que la compra está cometiendo un delito mayor, y si lo emite, mucho mayor”. No solo eso, sino que señalaba, implícitamente y sin necesidad de nombrarla, tanto a Unicorn Content, productora de TardeAR, como a Ana Rosa Quintana, presidenta de la compañía.