El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, pidió este jueves a Rusia que retire sus tropas de Moldavia y criticó que Moscú siga presionando a Chisinau mediante “chantaje energético y desinformación”. “La OTAN apoya plenamente la soberanía e integridad territorial de Moldavia y pedimos a Rusia que retire sus fuerzas de tu territorio. Puedes contar con nuestra asistencia continua”, afirmó Stoltenberg en una declaración junto al primer ministro moldavo, Dorin Recean, con quien se reunió hoy en Bruselas, en la sede de la Alianza.

En un comunicado, las autoridades moldavas expresaron su preocupación por explosiones en "lo que llaman estructuras de seguridad" en Tiraspol.

Rusia comienza a movilizar tropas en la Transnistria ocupada de Moldavia. Moscú está redistribuyendo sus tropas en la Transnistria ocupada para demostrar su disposición a atacar a Ucrania desde el suroeste y ante posibles provocaciones en la frontera, dijo el Estado Mayor.

El reconocimiento de Moscú de los territorios ucranianos separatistas ha provocado comparaciones con operaciones rusas pasadas destinadas a contrarrestar la influencia occidental y reforzar su profundidad estratégica en el antiguo bloque soviético.

Abjasia, que era una república autónoma dentro de la república soviética de Georgia, intentó convertirse en una república soviética más (e incluso así se auto-declaró en 1990) para que una hipotética independencia de Georgia no la condenara a separarse de la Unión Soviética y tener que seguir formando parte de Georgia con la que tenía serias tensiones étnicas. Sin embargo, al año siguiente Georgia declaró su independencia de la Unión Soviética y poco después anuló la constitución soviética y restauró su antigua constitución de 1921

Más de veinte años después de proclamarse independiente, la República de Transnistria habita en el limbo de la guerra fría: mientras Chisinau da la mano a Bruselas, Tiráspol mira hacia Moscú (aunque no la reconozca como Estado).