Los laboratorios farmacéuticos Takeda Pharmaceuticals y Eli Lilly han ocultado los riesgos para la salud de su medicamento contra la diabetes Actos (pioglitazona). Un tribunal de Estados Unidos (EE.UU.) les ha multado por ello con 9.000 millones de dólares (6.550 millones de euros). Un número indeterminado de personas padecen ahora cáncer de vejiga por haber tomado el fármaco.

Las autoridades sanitarias indonesias urgieron a parar la venta de todo tipo de jarabes tras la muerte de 99 niños por fallo renal desde enero que se asocian potencialmente a medicamentos fabricados en India. La emergencia surge después de que la OMS emitiera una alerta sobre cuatro jarabes contra la tos y el resfriado producidos por el laboratorio indio Maiden Pharmaeuticals, que podrían haber provocado la muerte de más de 60 niños en Gambia. Maiden Pharmaceuticals vende en países de Asia, África y América Latina

El presidente del Comité Olímpico Japonés, Tsunekazu Takeda, está imputado en el Estado francés por «corrupción activa», sospechoso de haber sobornado a miembros africanos del COI para que Tokio lograra la atribución de los Juegos de 2020.Takeda, de 71 años y considerado uno de los artífices de que la capital japonesa se impusiera en 2013 a Madrid y Estambul, fue interrogado el mes pasado por un juez francés que desde hace tres años investiga presuntas irregularidades.

Martin Shkreli ha sido sentenciado a siete años en prisión por defraudar a inversores. El juez Kiyo Matsumoto sitúa la sentencia a medio camino entre las demandas de la fiscalía y los abogados defensores. El antiguo gestor de fondos apenas reaccionó a la sentencia. Antes del veredicto Shkreli se dirigió al tribunal entre lágrimas para pedir disculpas y asegurar que había aprendido de la experiencia. Shkreli es conocido por haber aumentado en un 5.000% el valor de una medicina contra el SIDA como CEO de Turing Pharmaceuticals.

Durante el último año, han habido varios casos de especulación en los precios de algunos productos de la industria farmacéutica de EE.UU. El viernes por la tarde denunció ante sus 2,6 millones de seguidores en Twitter que la compañía Ariad Pharmaceuticals incrementó el precio de su fármaco para la leucemia, Iclusig, "más de 181.000 euros en un año". A las pocas horas, la empresa perdió el 15% del valor de sus acciones, es decir, más de 352 millones de euros.

El empresario, conocido por subir el precio de un medicamento esencial para la toxoplasmosis un 5.500%, ha sido arrestado por fraude. La detención no tiene que ver con esta subida, sin embargo, sino con el uso de fondos de su anterior compañía, Retrophin, una empresa que fundó en 2011 y de la que había sido expulsado "por serias preocupaciones acerca de su conducta", para pagar deudas no relacionadas con ella. Se le acusa de hacer esto después de que su hedge fund quebrara dejando millones en deudas pendientes.

La pastilla, fundamental para pacientes con VIH, había subido de 13,5 a 750 dólares tras ser comprada por Turing Pharmaceuticals.

Declaración oficial de la empresa farmacéutica sobre el incremento en el precio del medicamento Daraprim para el tratamiento de la toxoplasmosis.