El PP se prepara para una nueva campaña electoral con gestoras en Madrid y Valencia, con sus cargos pendientes de los casos de corrupción y sin liderazgos de peso a nivel territorial porque Rajoy no ha permitido que se celebrasen los congresos regionales. A pesar de todo, en Génova dan por hecho que su formación volverá a ganar y mejorará sus resultados, a la espera de que, tras esta segunda vuelta, no haya más vetos de PSOE y Ciudadanos.