Anoche, al salir de mi portal, estuvo a punto de atropellarme un patinete. De no haberme retirado a tiempo, me habría causado un daño importante, a juzgar por la velocidad a la que se desplazaba. Me despisté, no creí que a esa hora circulasen ya bicis o patinetes por mi acera. La próxima vez saldré del portal en estado de alerta, sea la hora que sea, por la cuenta que me trae. Es escalofriante ver cómo nos van sorteando por las aceras, como si fuésemos obstáculos de una carrera, a los que caminamos autónomamente, pero también a personas que..