Un hombre de 42 años murió el pasado domingo en Denver mientras participaba en un concurso de comer donuts. Travis Malouff se asfixió mientras intentaba devorar un pastel gigante en 80 segundos. La competición, organizada por Voodoo Donughts, premiaba al ganador con su pastel gratis y un cartel que le nombraba vencedor. Después de este suceso, el certamen fue suspendido. Según aseguró una de las camareras, el fallecido había elegido "una tarta del tamaño más pequeño".