La vicepresidenta y ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha hecho una llamada al «consumo prudente» y ha animado a los españoles a «reducir el tiempo de ducha» como medida para ahorrar energía. «Hay muchos consejos que conocemos todos. Podemos jugar con las persianas y los toldos con la primera hora de la mañana y de la noche, podemos asegurarnos de que el uso que hagamos del aire acondicionado sea en la habitación en la que se necesita y a la temperatura que se necesita, que no necesariamente son 18 grados (…).

Una mujer limpiando las persianas de su casa desde el alféizar de su ventana en Gijón se ha convertido en viral. Lo hace desde un séptimo piso de la calle Manso, en el barrio La Arena, sin ningún tipo de protección y solo sujetándose con las manos al marco de la ventana. En las imágenes se aprecia como la mujer, desde la última planta del edificio, pasa más de un minuto en la parte exterior de la ventana, en bata y zapatillas de ir por casa, moviéndose de pie mientras limpia con un trapo su persiana.

Los comerciantes y hosteleros, golpeados fuertemente por los efetcos de la pandemia del coronavirus, están convencidos de que esta no es una nueva normalidad, sino una realidad completamente distinta. Hablamos de negocios familiares, que en muchos casos han pasado de padre a hijos, y que tienen un lugar en el imaginario colectivo de los valencianos. La mayoría sigue resistiendo el mazazo de un virus que llegó sin avisar y que dejó los almacenes llenos para unas Fallas que no llegaron a celebrarse.

“No sabes lo que tienes hasta que lo pierdes” es un adagio utilizado frecuentemente para hablar de la pérdida amorosa, pero que parece ideado para referirse a algo al menos tan importante en nuestras vidas como el amor: las persianas. “Joder que si las echo de menos”, me cuenta Raúl Ávila, un ingeniero informático de 39 años que lleva un lustro viviendo en Londres.

Una bebé de 16 meses falleció este miércoles por la tarde en un domicilio del distrito madrileño de Barajas por ahogamiento cuando, al parecer, se salió de la cuna y su cuello se enredó con la cuerda de una persiana, según informaron fuentes de Emergencias de la Comunidad de Madrid. El suceso ocurrió alrededor de las 18.00 horas en una vivienda de la calle Borox, en el barrio de Corralejos, cuando, según las primeras hipótesis, la pequeña trató de bajarse de la cuna y accidentalmente se estranguló con la cuerda de una persiana.

Para no ser identificado por los radares de tráfico, un conductor alemán de 54 años inventó un sistema de persiana eléctrica, que mediante un botón accionado desde el interior del vehículo, tapaba la matrícula. El invento le funcionó bien hasta que una patrulla lo pilló con la placa tapada y le dio el alto. Fue entonces cuando descubrieron la artimaña del sujeto, que reconoció que lo tenía para evitar las multas del radar.

Los hechos se remontan al 5 de junio de 2017, cuando los dos empleados recibieron un parte de trabajo para limpiar el cajetín de la persiana de un despacho de la tercera planta del edificio D2 de la UJA. En el parte se les avisaba de que en el interior del tambor de la persiana podían haber anidado murciélagos. La Fiscalía les imputa un delito contra la fauna, porque los murciélagos de herradura están catalogados como especie vulnerable.

Cuando era pequeño, una persiana era un tesoro. Recuerdo que en la casa de mi abuela, en el pueblo, jugábamos con las persianas, algo que hoy en día se vería raro. Las persianas nunca supusieron un problema, al menos yo nunca lo vi como tal. Nunca nos advirtieron de que fueran algo peligroso. Se acaba de publicar un interesante artículo que analiza las consultas en urgencias por lesiones relacionadas con persianas en menores de seis años en EE.UU. Cada mes un niño muere por accidentes con las persianas.

La marca propiedad del grupo Arcadia aterrizó en la ciudad condal en 1999, para extenderse un año después a la madrileña Puerta del Sol. Allí contaba con una gran tienda de varias plantas que será reemplazada por otra enseña. Más tarde, Topshop desembarcó en Marbella y Granada. Hoy dice adiós a nuestro país de manera definitiva tras cosechar unos resultados peores a los esperados, como adelantó el portal especializado Modaes.

La mujer salió por un ventanal y puso sus pies en el alféizar o cornisa para limpiar la persiana y las ventanas. El edifico tiene bajo, entresuelo y otras cuatro plantas, pero lo hizo sin utilizar ningún tipo de medida de seguridad. La imagen tomada por un aficionado con su teléfono móvil empezó a circular por las redes sociales, así como diferentes tipos de mensajería, logrando que se extendiera con gran rapidez de unas manos a otras.

Ama de casa limpiando las persianas en "Al filo de lo imposible". Cuarto piso con bajo comercial y sin red. Riveira 17 junio de 2015.

Vídeo del incendio en una vivienda el domingo 5 en Vinaròs en el momento en que salen los billetes volando, parece que estaban guardados en la persiana de la Ventana. Tanto testigos del incendio como fuentes de la Policía Local comentaron que, tras una explosión que rompió los cristales de la vivienda, comenzaron a salir despedidos billetes que volando fueron a parar a la calle. Algunos de los vecinos apuntaron la hipótesis de que los propietarios habían intentado salvar algunos de los ahorros en efectivo de la vivienda.