Durante estas últimas semanas los MIR (médicos internos residentes) han estado denunciando las condiciones en las que trabajan y por ello convocaron una huelga indefinida y que se están manifestando todos los lunes desde entonces. Reivindican sus derechos como personas en formación: denuncian que trabajan 60 horas semanales por un sueldo, básicamente, de becario. Y denuncian además que después de las guardias tienen que dormir en una cama en la que ya ha dormido alguien. Lo llaman camas calientes y apuntan que puede ser un foco de coronavirus.

Álvaro de Orleans-Borbón aseguró al fiscal Bertossa que ingresó el dinero mediante un cheque en la cuenta bancaria de Crédit Suisse que abrió la Fundación Zagatka, de la que era beneficiario Juan Carlos I

Los MIR representan el 37% de la plantilla de los hospitales públicos madrileños: 4.279 efectivos, más que el número de interinos, 4.016.

La marcha ha arrancado frente a una de las sedes de la Consejería de Sanidad, en la calle Sagasta, y enfila a esta hora de la mañana la Gran Vía madrileña. La movilización arranca aplausos a cada paso, de los balcones y de los viandantes. "Pensaban que seríamos cuatro gatos porque somos un sector pasivo, al que le cuesta moverse históricamente y también porque sabes que dejas a los pacientes", analiza una médica.