Cuando nos referimos al “estado de excepción” pensamos, que es un espacio jurídico donde el dictador o soberano consigue imponer lo “ilegal”, esto es, suspende las garantías propias de un estado de derecho, a través de una ficción que justifica tal estado de emergencia. El resultado de la aplicación de esta ley ha sido, pues, el inexorable e incesante fomento de la minería indiscriminada en España durante los últimos 45 años y la suspensión de la aplicación de la normativa de ordenación del territorio, urbanística y ambiental