Quien pierda al Mario Kart, prepara el té. Esa es la norma impuesta por un matrimonio que lleva 18 años jugando a “Mario Kart” para determinar a quién le toca hacer el té. Así lo hacía saber un hijo que contó en Reddit la historia de sus padres. En 1999, fue el matrimonio quienes le regalaron la Nintendo 64, pero en 2001 ya empezaron a usarla más que el hijo. Y desde entonces no han parado. La mecánica de decisión es simple: una partida de Grand Prix y una batalla al mejor de tres. El perdedor hace el té; el ganador se queda en el sofá.

Los hospitales en Inglaterra ya están al 94% de su capacidad, con cuatro de cada cinco camas de cuidados intensivos

El secretario de gabinete de Boris Johnson, Simon Case, ha anunciado este viernes que dejará su cargo al frente de la investigación que lideraba por las fiestas celebradas en Downing Street, que han levantado la polémica en Reino Unido ya que se celebraron cuando en Londres no se permitían las reuniones en interiores. Case, que había recibido el encargo del propio Johnson, ha abandonado la investigación después de que se filtrara que una de las fiestas se celebró en su propia oficina, por lo que su papel se puso en duda.

Un evento organizado en Facebook está tomando fuerza y subiendo como la espuma. Se trata de una fiesta masiva.

Reino Unido veta vuelos desde seis países africanos ante la nueva variante del coronavirus. Un experto de la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido (UKHSA, en inglés) ha declarado a los medios que la variante B.1.1.529 es "la peor que hemos visto hasta ahora", y ha resaltado que la proteína de la espícula es "dramáticamente" distinta a la del virus original debido a las mutaciones.

La salida de la UE está siendo un desastre económico sin ambages para el Reino Unido, pero un sector concreto de la economía británica se ha visto muy beneficiado por él, al dispararse las exportaciones de Irlanda del Norte. La clave de estas cifras es la excepcional situación de la provincia británica, dentro del Reino Unido y, a la vez, del Mercado Común europeo. El resultado es que los productos fabricados allí no tienen ningún tipo de control aduanero a la hora de ser exportados a la UE, ni para cruzar el mar hacia Gran Bretaña