En marzo de 2015, el hoy presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, prometía en Santander que él daría forma a "la España que puso fin a la impunidad de las élites financieras, que echó el candado a las puertas giratorias" En todo caso, lo que siempre mantuvo fue un tono crítico con el hecho de que las empresas contratasen a políticos para sus consejos, con lo que coloquialmente se denomina colocar, y con el pago de favores recibidos con puestos atractivos y bien remunerados. Y sin embargo, eso es precisamente lo que está haciendo ahora.